lunes, 27 de febrero de 2012

ELIMINANDO A DAGÓN



ELIMINANDO A DAGÓN



Y cuando al siguiente día los de Asdod se levantaron

De mañana, he aquí Dagón postrado en tierra delante del arca

De Jehová; y tomaron a Dagón y lo volvieron a su lugar.



(1 Samuel 5:3)



Consideremos que los filisteos, venían de ganar una batalla ante sus siempre enemigos Israelitas, sus corazones filisteos estaban llenos de gozo y habían logrado adquirir el más grande de los trofeos que pudieron imaginar. Más que quitarle el Big Ben a los ingleses, más que quitarle el obelisco a los argentinos, más que quitarle la torre Eiffel a los franceses, era quitarle el arca de Dios al pueblo de Israel.



Por lo tanto, el arca de Dios era más bien un trofeo para los filisteos, un trofeo que debía ser visto de vez en cuando y que es importante que esté en vitrina, pero que puedo verlo cuando quiero gloriarme de mis logros. (Para eso son los trofeos, para recordar mis logros)



Ahora, el pueblo de Israel, había perdido el arca, porque precisamente, se había vuelto un amuleto de suerte para sus batallas que podía ser usado y se habían olvidado de la real importancia de esa arca (1 Samuel 4:1-11) (Si leen este relato bíblico, podrán darse cuenta que esto es así)



Para que tengan una idea, el arca del pacto de Jehová de los ejércitos era una pequeña caja de madera, recubierta de oro. De ninguna manera era un objeto pesado o voluminoso, mas sin embargo era muy sagrado, pues tenía un carácter representativo, y simbolizaba el pacto de Dios, la gloria de Dios, la santidad y la presencia de Dios. La urna sagrada fue cargada en triunfo por los filisteos, y llevada al templo donde permanecía Dagón. (Éxodo 25:10-16)

De acuerdo a la mejor información disponible, Dagón por su parte era el dios-pez de Filistea, tal vez tomado de los sidonios y de los hombres de Tiro, cuya actividad principal radicaba en el mar, y que, por tanto, inventaron una deidad marina. La parte superior de Dagón era un hombre o una mujer, y la parte inferior del ídolo estaba tallada como un pez.  Algo así como una sirena. Dagón era simplemente un ser con un cuerpo que mesclaba al hombre con el pez; sólo que, por supuesto, no se tenía la pretensión que viviera. Era una imagen tallada, como esas que los papistas adoran y llaman la Bendita Virgen, o San Pedro o san Sebastián.

El templo de Asdod era, tal vez, la catedral de Dagón, el santuario principal de su adoración; y allí se sentaba erguido sobre el elevado altar, rodeado de pompas. 

Pero lo interesante hermanos amados, y es lo que estudiaremos esta tarde, es notar lo que sucede cuando el arca de Dios entra en el templo profano de los filisteos. ¡Es toda una ilustración que enseñará a nuestras vidas hoy!



A- EL TEMPLO FILISTEO ES NUESTRO CORAZÓN ANTES DE SER SALVOS



¿No era acaso nuestro corazón sin Cristo una cueva de ídolos? ¿No era acaso nuestro corazón un lugar profano, lleno de inmundicia, de falsa adoración y paganismo? ¿No éramos acaso filisteos orgullosos, vanidosos, ególatras que miraban a Dios como un trofeo que podía ser tomado en cuenta cuando queríamos recordar lo buenos que éramos? ¿No teníamos a Dios en vitrina solo para ser visto de vez en cuando? ¿Acaso no era Dios un simple trofeo para nosotros que pensamos haber obtenido por nuestros propios meritos? ¡Cuán profano e inmundo era el templo donde habitaba Dagón! ¡Y cuan vil era nuestro corazón antes de conocer la gracia! ¿No servíamos al mundo y a los hombres?



B- CUANDO LA GRACIA DE DIOS ENTRÓ EN NUESTRO CORAZÓN, SE ENCONTRÓ CON ALGUIEN MÁS EN SU LUGAR (v2)



Los filisteos pusieron el arca en el mismo lugar donde estaba Dagón, pensando que hacía bien, que le hacían un favor al arca, pero DIOS NO COMPARTE SU LUGAR CON NADIE, el es celoso, Santo.



Esa es la razón por la cual debió tomar el trono que le corresponde, por sobre todo ídolo. (Éxodo 20:5-6)



C- PRIMERO ENCONTRARON A DAGÓN POSTRADO EN TIERRA (v3)



El ídolo ha sido sometido, más no eliminado, ha sido dominado quizás, más no eliminado. Sin embargo esto nos enseña que el que verdaderamente es salvo, debe tener una lucha aunque sea consigo mismo y las cosas más importante de sus vidas deben ser rendidas a los pies del Señor.



Aquellas cosas que tienen un lugar de importancia en nuestro ser, jamás deben tomar el mismo o mayor lugar que Dios, porque esas cosas corren peligro. O son sometidas a los pies de Dios, o son quebradas y destruidas poco a poco.



Sin embargo, a pesar de que el ídolo había sido sometido por Dios, LO VOLVIERON A PONER EN SU LUGAR, yendo en contra de la obra que Dios había hecho, despreciando el trabajo de Dios.



D- LA SEGUNDA VEZ LO ENCONTRARON DESTRUIDO (v4)



Ya no tenía manos ni piernas y al parecer el ídolo ha sido destruido, ha caído Dagón, quedó postrado, sus palmas en el umbral del templo haciendo reverencia a Dios, sin embargo nos dice la biblia que el tronco quedo de Dagón.



A pesar de lo herido que podía estar el ídolo, aún no había sido destruido aún, quedó el tronco del ídolo que quería tomar el lugar que le corresponde a Dios.



* Este acto hermanos, estaba mostrándole a los filisteos que había UN DIOS y que ese Dios no compartiría su lugar con nadie, además, este acontecimiento le mostraba a los filisteos que el Dios de Israel era más poderoso que aquel Dagón al cual adoraba ellos, pues su dios terminó postrado ante los pies de Jehová de los ejércitos y este acontecimiento le mostraba que Dios quería purificarlos y eliminar toda idolatría en sus vidas. Sin embargo, la reacción de los filisteos fue:



(1 Samuel 5:6-7)



“No quede con nosotros el arca del Dios de Israel, porque su mano es dura sobre nosotros y sobre nuestro Dios Dagón” (v7)



Desecharon la gloria del único Dios, la presencia de Dios y el pacto de Dios junto con su santidad, porque su mano era dura sobre ellos y sobre su Dios Dagón.

A pesar de lo que recién había acontecido, a pesar de que vieron lo débil y penoso que era su dios postrado, destruido ante los pies del Altísimo, prefirieron la mediocridad de Dagón antes que la santidad de JEHOVÁ DE LOS EJERCITOS.



PORQUE SU MANO ES DURA SOBRE NOSOTROS Y SOBRE NUESTRO DIOS DAGÓN. (Eso es mediocre)



¿Entonces, que debía hacer el pueblo? ¿Bajarle la santidad de Dios, esperar que Dios compartiera su lugar con sus ídolos y que les bendijera por su idolatría? Debía el Santo de Israel compartir su trono con Dagón? ¡No señores! Jamás tal cosa acontezca, Dagón debe ser sometido y puesto a los pies de Jehová y no solo sometido si no que totalmente destruido para que el Señor tome el lugar que realmente merece.



JESÚS TUVO EL MISMO PROBLEMA (Juan 2:13-22)

LOS JUDIOS TUVIERON ESTE PROBLEMA CON JESÚS (Juan 19:1-16)



Dagón tenía otro nombre, ahora se llamaba Cesar y se llamaba riquezas



¿Y no es esto lo que pasa con nosotros también?









Aceptamos al Señor y el Señor encuentra en nuestro templo la más vil de las inmundicias incluido a Dagón entronado como lo más importante para nosotros, que quizás no se llama Dagón, pero tiene otro nombre. (Riquezas, sueños, familia, hijos, dinero, etc.) Y al llegar Jesucristo debe someter a Dagón y eso es notorio ante los ojos de los demás, lo somete en el silencio de la noche, en el interior del templo para testimonio de los demás paganos como tú. PERO EL GRAN PROBLEMA NUESTRO Y DEL HOMBRE EN GENERAL ES QUE AL VERLO SOMETIDO, “VOLVEMOS A PONERLO EN SU LUGAR” (1 Samuel 5:3) en un trono que no le pertenece al ídolo. Es entonces cuando la presencia de Dios, la santidad de Dios y el precioso pacto que ha hecho con nosotros, hiere al ídolo, destruye al ídolo, pero nosotros dejamos el tronco para que no sea eliminado por completo



Y cuántos de nosotros, preferimos decir: “No quede con nosotros el arca porque su mano es dura contra nosotros y contra nuestro dios Dagón”



Preferimos convivir con la mediocridad de nuestro ídolo, con la pobreza y debilidad de nuestro dios Dagón, antes que someternos al poder, la santidad, la excelencia del Dios Santo de Israel. PORQUE SU MANO ES DURA, es muy alto el estándar, es muy exigente, es mucha la santidad, no lo puedo sobrellevar, no puede ser que sea tan alto el estándar ¡Pues claro que sí! ¡Si no estás tratando con tu dios Dagón, estás hablando con,  el tres veces Santo Dios Todopoderoso!



El problema hermanos es que DIOS NO PUEDE CONVIVIR CON SUS IDOLOS, NO PUEDE COMPARTIR SU TRONO Y LOS IDOLOS TRAEN OTROS PROBLEMAS.



A- No podemos servir al Señor con nuestros ídolos (Josué 24:19-20)

B- No podemos agradar ni adorar al Señor con nuestros ídolos

C- Dios no está con nosotros si están nuestros ídolos en nuestro templo

D- Pecamos contra Dios al tener ídolos, quebrantamos el 1 mandamiento



APLICACIÓN



Por lo tanto, debemos en primer lugar identificar cual es aquel Dagón que toma el lugar que le pertenece a Dios con toda la sinceridad de tu corazón y luego  eliminar nuestros ídolos, no tan solo someterlos, no tan solo quebrantarlos, ELIMINARLOS POR COMPLETO, no lo pongamos a los pies de Dios y luego lo volvemos a poner en su lugar, no le quebremos algunas partes y dejemos el tronco ELIMINEMOS LOS IDOLOS, DEJEMOS QUE EL SEÑOR TOME SU AZOTE DE CUERDAS Y CON TODA ESA SANTA IRA ELIMINE LOS IDOLOS Y PURIFIQUE NUESTRO TEMPLO (1 Juan 5:21) ¡Señor purifica nuestros corazones, elimina nuestros ídolos y toma el lugar que mereces!

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